En Secundaria, en las clases de Lengua, durante esta semana estamos contando historias de miedo, inventadas por los propios alumnos o de otros autores. Es una temática muy apropiada para la época en la que estamos y, además, es un tópico muy atractivo para los adolescentes.
Otro de los objetivos de esta actividad es perder el miedo a hablar en público y aprender a mejorar su expresión oral. Contar historias es una muy buena manera de practicar y mejorar esta habilidad.
Para esta actividad será necesario dramatizar la lectura de tal manera que la intensidad del suspense sea progresiva y que, poco a poco, se vaya aumentando la dosis de incertidumbre, de temor, miedo o pánico. Para ello, los alumnos jugarán con su tono de voz y sus gestos.
Estamos seguros de que esta experiencia será aterradoramente divertida.